La Suerte de Arrayán 2018: la inimitable gracia de la garnacha

IGNACIO PÉREZ LORENZ

Es la página que cierra un libro después de haber mostrado todo su contenido. La historia de un vino amable, suave, pulido y cargado de sabor que descubre su largo camino. Recorrido que comenzó, a mediados  del siglo pasado, sobre una de las caras de la Sierra de Gredos. Exactamente en varias  parcelas situadas en El Real de San Vicente (Toledo) plantadas en aquellos años con una variedad, la garnacha, que había demostrado su buena adaptación a la zona. 

Siete décadas más tarde La Suerte de Arrayán 2018 nace del fruto recogido en esas suaves laderas. Un lugar que reúne todas las condiciones para elaborar grandes tintos: altitud, cultivo en vaso, marcadas diferencias térmicas entre el día y la noche y suelos pobres compuestos de granito y arena. A todo ello se añade suficiente experiencia y last but not least la mirada abierta de una enóloga, Maite Sánchez, capaz de presentar casi desnudo un vino que es precisamente eso: solo vino.

En la copa se ofrece abierto de color y distinguido por delicados aromas florales y frutales. Resulta jugoso, vibrante y fresco tras dejar claro que permanece ajeno a cualquier huella excesiva de la madera. Entre sus matices parecen adivinarse recuerdos a hojas secas, tonos picantes, puntas de alcohol y notas minerales. Es parte de la complejidad de un tinto elegante y de seductora textura que te va enseñando poco a poco a beberlo y a apreciarlo. Y en el que se sienten y se palpan sus uvas, sus hollejos, su entorno y la inimitable gracia de la garnacha. 

Bodegas: Arrayán
Web: https://www.arrayan.es
DO: Méntrida
Variedad: garnacha
Alcohol: 14 %
PVP: 15 euros