IGNACIO PÉREZ LORENZ
Son increíbles viajes de ida y vuelta que tienen como protagonistas a dos variedades que regresan convertidas en vino. El más sorprendente, y el último de ellos en saltar de uno a otro continente, es Tempranillo 2017 Viñedo Don Miguel. La expresión de un vidueño que combina raíces riojanas y ribereñas con las brumas del Pacífico para ofrecer una lenta madurez que no le hace perder su carácter.
Le distinguen algunas notas tostadas y otras a caramelo y canela además de marcados recuerdos a fruta negra y leves apuntes a regaliz. Tinto fresco, amplio y profundo que se ha impuesto con decisión a la madera para anunciar su favorable evolución. Una llamada a plantar más tempranillo (en ese clima y esas tierras californianas tan diferentes y tan alejadas de su lugar de origen) que probablemente consiga aumentar en unos pocos años el número de botellas elaboradas y el placer a producir.
Procedente de cepas más veteranas llega la cosecha 2018 de un vino que ya en su nombre anuncia una atractiva suma de culturas: Pinot Noir Mas Cavalls Viñedo Doña Margarita. Confirman esa impresión su capacidad de reflejar el esquivo perfil de la uva borgoñona y la suavidad de su textura. Los aromas a arándanos y a otras frutas salvajes forman parte del frescor que lo traspasa, matizado por la presencia de la madera y las tenues notas animales, hasta concluir en un largo final. El momento de apreciar las últimas sensaciones de un trago elegante, sugerente y hasta evocador.
Bodega: Marimar Estate
Web: https://www.marimarestate.com
Origen: Green Valley/Sonoma Coast
Variedades: tempranillo/pinot noir
Alcohol: 14,5 %/14 %
PVP: 51 euros/53 euros