REVISTA DEL VINO se siente orgullosa de ceder su espacio a José Andrés. Cualquiera de sus iniciativas nos parecía especialmente interesante antes ya de que este cocinero alcanzara otra dimensión; de que nadie o casi nadie interpretara como él las palabras: hambre, tragedia, comida, solidaridad o justicia. Es el momento de que otros muchos sigan a cuantos ya se han unido a un hombre que lucha por el más importante de los motivos: conseguir un mundo mejor. Y, por favor, cuando acabe de leer este artículo (incluso antes) pinche el enlace situado al final del texto. Es la mejor forma de echar a andar esta aventura.
Mesas más largas, no paredes más altas
¡Bienvenidos! Juntos podemos canalizar el poder de los alimentos para cambiar el mundo. Una comida nunca es solo un plato de comida. Tiene el poder de cambiar el mundo. Para unir a la gente. Para contar la historia de quiénes somos y hacia dónde vamos. Por eso comencé a hablar de mesas más largas cuando otros querían construir paredes más altas.
Necesitamos hablar entre nosotros, disfrutar de nuestras diferencias, celebrar nuestra diversidad. No alejar a las personas porque se ven o suenan diferentes. Nuestros desafíos pueden ser complicados, pero las soluciones a veces son muy simples. ¡Únete a mí en mis misiones, quédate conmigo en mi cocina y camina a mi lado por las calles del mundo! Regístrese gratis o conviértase en un suscriptor pago. Hasta el 31 de diciembre de 2022, ¡el 100 % de nuestros ingresos netos por suscripción se donarán a World Central Kitchen!
Longer Tables, el nombre de este boletín, es mi forma de decir que no somos demócratas o republicanos, estadounidenses o inmigrantes, carnívoros o veganos. Somos la gente del mundo, que cocinamos, comemos y bebemos juntos. ¿Por qué creo en el poder de los alimentos para cambiar el mundo? Porque lo he visto en muchos lugares.
Es fácil aprender a esperar lo peor de las personas en los peores desastres. Pero lo que he visto en zonas de guerra y huracanes, incendios forestales y desiertos alimentarios, y más recientemente en Ucrania y Uvalde, es todo lo contrario. En tiempos de necesidad, la gente da un paso al frente. En tiempos de desastre, puedes ver comunidades uniéndose. Puedes ver lo mejor de la gente. Todo lo que necesita hacer es ayudarlos a servirse a sí mismos, un plato a la vez. Una comida caliente les dice que alguien, en algún lugar, se preocupa. La comida es el comienzo de una vida mejor. Es un plato de esperanza.
Lo que estoy cocinando en Substack
Longer Tables es un hogar para historias que muestran cómo la comida nos conecta. Cada semana, exploraré nuestra historia alimentaria compartida y el futuro alimentario, la política del hambre y la nutrición, y el estado del socorro en casos de desastre. Con la ayuda de mi talentoso equipo, también responderé a sus preguntas sobre cocina, publicaré interesantes entrevistas y perfiles de mis héroes gastronómicos, además de postales en video de mi hogar en Washington, D.C. y mis viajes.
Acerque una silla a nuestra mesa más larga
Hablando de viajes, es posible que hayas notado que viajo mucho. Longer Tables será una forma clave de mantenerme en contacto con nuestra creciente comunidad de amantes de la comida y activistas. Además del material gratuito disponible para todos, enviaré mensajes de video exclusivamente para suscriptores desde donde esté, ya sea en Lviv o viajando (y comiendo) en mi España natal.
Los miembros también tendrán acceso a un archivo de mis recetas favoritas, desde clásicos como el gazpacho blanco y las gambas al ajillo, hasta mis tapas favoritas, algunas de las cuales ni siquiera requieren que enciendas la estufa. (Abrir una lata de anchoas españolas. Abrir un bote de pimientos del piquillo. Montar en un plato y decorar con aceitunas verdes. Rociar con aceite de oliva. ¡Pum!)
Los miembros de Substack también pueden unirse a los hilos de discusión mensuales de la comunidad sobre esas recetas, trucos de cocina y, por supuesto, las políticas alimentarias nacionales e internacionales que nos afectan a todos. Todo esto cuesta $6 (5,60 euros) al mes o $50 (47 euros al año). Y durante los primeros seis meses de publicación, hasta el 31 de diciembre de 2022, Longer Tables donará el 100 % de nuestros ingresos netos por suscripción a World Central Kitchen. (Después de eso, el 20% de nuestros ingresos netos por suscripción se destinarán a WCK). Para que pueda alimentar su cerebro mientras alimenta al mundo.
Una cosa más: si no puede pagar una suscripción, ¡no se preocupe! Vine a Estados Unidos como un joven cocinero con solo unos pocos dólares en el bolsillo. Quiero reunir a la gente alrededor de Longer Tables. Si desea convertirse en miembro pero no puede, envíenos un correo electrónico a longtables@thinkfoodgroup.com. Te registraremos, sin preguntas.
Gente del mundo: Sé que las noticias de hoy pueden parecer oscuras. Pero también necesitamos hacer un hueco a la alegría y a la esperanza. Juntos podemos canalizar el poder de los alimentos para mejorar las cosas. Todo comienza con la construcción de tablas más largas. Espero que te unas a mí.
Más información: https://joseandres.substack.com
Foto: WCK