Pepe Raventós: “Los espumosos españoles están lejísimos de donde estarán”

La suya parece una relación romántica y duradera con el vino. Le atrapó sobre todo, dice, su estrecha conexión con la naturaleza, la importancia que esta tiene y el trabajo que podemos realizar en su cuidado para lograr un buen vino. Quizá por todo ello entre sus pasiones se encuentre el viajar descubriendo nuevas zonas vitícolas. “No me canso de volver a lugares que ya he visitado”, asegura. “Es una manera de conectar y conocer paisajes increíbles, culturas diferentes y, ante todo, gente maravillosa”. 

Así piensa quien ahora dirige Raventós i Blanc, bodega de Sant Sadurní d’Anoia (Barcelona), que acumula generaciones y siglos en manos de la misma familia. Y a la que parece ha llegado desde hace algún tiempo ese momento en el que los reconocimientos se suceden. El último, la inclusión entre los 51 Wines of the Year 2021 de la revista Decanter. Un premio que solo han alcanzado seis vinos españoles: tres tintos, un blanco, un generoso y un espumoso: Mas del Serral 2009.

 Es la más pura expresión -explica- de la pequeña parcela de la finca familiar, Clos Serral, durante el año vitícola 2009. Un vino que te ha de trasladar a su origen, a estas escasas dos hectáreas de cepas de más de ochenta años de xarel·lo y bastard negre en coplantación.

-¿Y por qué dice Decanter que es “asombrosamente diferente”? 

-Porque es la añada (la segunda de Mas del Serral) que mejor hemos sabido interpretar hasta la fecha. 

-La sensación de que se está bebiendo algo tan interesante como diferente se tiene al probar cualquiera de sus vinos. ¿Por qué?

Porque usted cree en el trabajo que estamos haciendo, en todo lo que hay detrás de uno de nuestros espumosos. Va más allá del vino. Es una actitud especial frente a la copa lo que te lleva a estas sensaciones.

-Unos vinos que llegan al mercado como Conca del Riu Anoia. ¿Cómo es eso?

Porque reivindicamos el origen más íntimo de nuestros vinos. En el año 2011 decidimos que queríamos explicar de alguna manera nuestra forma de trabajar, nuestro compromiso con este terruño y nuestra visión de una denominación de origen dedicada a los espumosos, ligada a este territorio y con unos estrictos requisitos de viticultura y vinificación. Una geografía, una orografía, una edafología y climatología concretas ligadas a un lugar concreto. 

-Y porque no está ni en la D. O. Cava ni en Corpinnat. ¿Hay algo que no le guste o que no comparta con ellos?

Salimos de la D. O. Cava precisamente para reivindicar este origen y una forma de trabajar centrada en la viticultura. Corpinnat nació mucho después de nuestra salida de cava; en ambos casos creemos que su origen es demasiado amplio, abstracto e inconcreto. Y, además, en el caso de Corpinat, que no hay una ambición clara de futuro de crear una verdadera denominación de origen. De crear algo perdurable para un futuro.

-¿Podría decirse entonces que es usted un verso suelto o al menos que tiene esa vocación?

-No es a mí quien corresponde responder esta pregunta. Se me ponen muchos títulos diferentes. Pero creo que hay una oportunidad única de crear una denominación de espumosos de nuestra zona que pueda rivalizar con los mejores y perseguiré esta visión. 

-¿Y desde esa atalaya cómo ve los vinos espumosos españoles? ¿Dónde estamos y adónde vamos?

Lejísimos de donde estarán. 

-Su forma de cuidar la viña supongo que sorprendería a muchos: sostenible, autosuficiente, ecológica, biodinámica…¿Cómo se traduce en los vinos?

Hay mucho trabajo, inversión en la finca y determinación en el camino que queremos seguir. El terreno está aún a un 40 % de como debería estar. No es un resultado es un camino, seguimos caminando y avanzando cada día. Nuestros vinos provienen en un 60 % de nuestra finca, el resto proceden de viticultores de la zona con quienes trabajamos en estrecha relación. Apostamos por un claro compromiso con el territorio y esto pasa por apoyar a los payeses y mantener fincas y viñedos viejos. Nuestro trabajo va más allá de nuestra propia finca. 

-¿Le queda un vino por hacer? ¿Cómo sería y que le falta para conseguirlo?

-Estamos trabajando para aprender a vinificar la variedad sumoll y conseguir un vino que exprese la ancestral tradición de dicha variedad en nuestra geografía y en el tiempo. Sin embargo, no estoy cómodo con la actitud de búsqueda hacia hacer un vino mejor. Nuestra responsabilidad es seguir elaborando lo mejor posible nuestros vinos actuales.

I. P. L.