IGNACIO PÉREZ LORENZ
Es posible que un buen tinto ofrezca también enorme placer. Si bien en estas fechas -entre ola y ola de calor- los colores de los rosados, las notas florales de los blancos y las burbujas de los vinos espumosos llaman especialmente la atención. Relación de atractivos multiplicada por el frescor que, en mayor o menor medida, invade a todos ellos. Agosto puede ser el gran momento para probar o volver a probar algunas de las elaboraciones consideradas imprescindibles en estas páginas por su calidad, su originalidad o cualquier otro motivo. Solo hace falta encontrar el lugar, el momento y la temperatura de servicio adecuada para disfrutar como nunca de la ligereza de algunos platos y algunos vinos.
Ancestral Montònega 2023
Una oportunidad de acercarse al método ancestral (una sola fermentación que comienza en depósito y concluye en botella). Delicado, seco, largo, estilizado y muy placentero. Marcados tonos cítricos, notas a hierbas y plantas aromáticas, bien integrado carbónico y poco alcohol. Can Sumoi, Baix Penedès, 15,75 euros.
Pazo de Seoane 2023
Un blanco de Rías Baixas (albariño, loureiro y otras variedades tradicionales) que se supera en esta añada. Profunda expresión, atractivos aromas florales y frutales, complejidad y sensación de volumen. Buena acidez e indudable elegancia. Lagar de Fornelos, 18,35 euros.
Laslías de Beronia 2022
Un verdejo de impactante sabor y brillantes aromas nacido de cepas plantadas hace setenta años en Madrigal de las Altas Torres (Ávila) y recientemente recuperadas. Su diseño y su larga crianza sobre lías, repartida entre depósitos de hormigón y barricas francesas de quinientos litros, lo han convertido en un vino con carácter, contenida fuerza y cierta cremosidad. Beronia, 18 euros
Chivite Las Fincas Rosado 2023
Flores, fruta blanca, recuerdos cítricos, frutos rojos (fresa salvaje, frambuesa) envueltas en frescor. La nobleza de dos variedades, garnacha y tempranillo, y el sangrado como método de elaboración permiten vestirlo con ligero color y muy amplio sabor. Un lujo hecho rosado, sutil, intenso y muy gastronómico. J. Chivite Family Estates, 12,85 euros.
Finca Lobeira 2019
Vibrante acidez, intensidad y fuerza combinadas con la sorpresa de un trago especialmente agradable. Procede de un viñedo situado frente al Atlántico a unos 130 metros de altitud. Un albariño enorme, con pequeños porcentajes de otras variedades, que exhibe larga crianza, Y que lleva adherida a su piel los vientos, la sal, el océano, el clima y el caracter de las Rías Baixas. Mar de Frades, 32 euros.