La Organización Interprofesional del Vino de Rioja y el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada Rioja han dado luz verde a un nuevo pacto que restringe el futuro crecimiento de la masa vegetal de esa denominación. En 2022 se limitarán los derechos de nuevas plantaciones y se diseñará un mecanismo que, con asesoramiento externo, determine los parámetros de rentabilidad y ratio (relación entre las existencias de vino y las salidas de bodega) a alcanzar para permitir nuevos repartos.
El acuerdo, alcanzado con el 95 % de los votos emitidos, establece que la superficie de viñedo no se incremente mediante arranques efectuados fuera de la denominación o por conversión de derechos que se hayan generado en otras zonas. El presidente del consejo regulador, Fernando Ezquerro, ha señalado al concluir el pleno que estas medidas velan “por un crecimiento ordenado que contribuye a la calidad y competitividad de la denominación”.
Foto: D. O. C. Rioja