Unos cincuenta eurodiputados han solicitado que el Ejecutivo comunitario tome medidas para paliar los efectos de los nuevos aranceles impuestos por la Administración Trump. Ese aumento de tasas al vino y otras bebidas alcohólicas fue la respuesta al caso Boeing-Airbus. En una carta remitida a los comisarios de Agricultura y de Comercio consideran “inaceptable” que los productores agroalimentarios asuman el coste de una disputa ajena.
Estos eurodiputados expresan su reconocimiento por el apoyo que ha recibido el sector vitivinícola para combatir los efectos de la Covid-19 pero critican la ausencia de ayudas en esta guerra comercial. Los firmantes de la misiva pidieron ya en marzo introducir un fondo de compensación por el cierre de la hostelería. “Sin embargo, esta solicitud fue ignorada”, aseguran.
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