La Junta de Castilla y León ha aprobado el nuevo reglamento de la DO Bierzo que convierte al consejo regulador en la entidad certificadora (hasta ahora sólo podía calificar) de la calidad de sus vinos de acuerdo con las exigencias de la Comisión Europea. Esta denominación de origen ha sido la primera de Castilla y León en actualizar su normativa.
Se cierra así el proceso de renovación del pliego de condiciones que consagra además el uso de denominaciones geográficas menores y su etiquetado, autoriza nuevos vinos y variedades de uva e incorpora a diez municipios. La presidenta del consejo regulador, Misericordia Bello, ha mostrado su satisfacción por unas medidas que, en su opinión, sitúan a la Denominación de Origen Bierzo “como una entidad moderna para poder acometer los próximos retos con éxito”.