El Primero ha llegado. En realidad llegó mucho tiempo atrás, nada menos que hace 25 años, aunque entonces se llamaba Primero de Toro. Su misión fue sustituir en algunos países a un simpático joven, con cierta gracia, que había conquistado buena parte del mundo bajo el lema ¡Le Beaujolais Nouveau est arrivé!
Camiones cargados de ese vino se agolpaban en las carreteras en cuanto estaba listo. Una situación que por seguridad, y por el marketing que siempre ha manejado esa historia, vivió un pequeño giro. Las botellas eran enviadas a su punto de destino con el compromiso de que no se abrieran hasta el tercer jueves de noviembre. Momento que miles de interesados solían y suelen esperar con verdaderas ganas de fiesta.
La celebración también ha saltado, más prudente, a este lado de los Pirineos. Unas horas felices para los amantes del vino que permiten además conseguir premios y participar en un concurso organizado por la bodega que termina el día 24. Comenzó el 21, fecha que coincide casualmente con el tercer jueves de noviembre.
El Primero, que inicialmente miró de reojo a su rival pasó pronto a hacerlo por encima del hombro. Y a ofrecer, añada tras añada, un tinto maduro y de calidad. Tras una cosecha redonda como la de 2018 nos ofrece en 2019 una versión más intensa.
La habitual exuberancia frutal (fresa, grosella) de la maceración o semimaceración carbónica aparece acompañada de evidentes tonos a regaliz y discretos apuntes golosos. Tiene en esta ocasión algo más de seriedad y puede que también de estructura pero manteniendo la habitual frescura y juventud de su carácter. De esa forma, sigue resultando igual de placentero pero deja claro que es más vino.
María Jesús Alonso
Bodega: Fariña
Web: https://www.bodegasfarina.com/
DO: Toro
Variedad: tinta de toro
Alcohol: 13,5%
PVP: 5,90 euros