El Consejo Regulador del Cava ha apostado por incorporar mejoras tecnológicas y sostenibles para supervisar la vendimia de 2019. Para ello, ha ampliado el número de verificadores de 18 a 70. Su misión, comprobar la entrada de la uva en bodega, su origen y el cumplimiento de requisitos de calidad recogidos en el pliego de condiciones.
El consejo ha lanzado además una aplicación para teléfonos móviles que permite a los verificadores transmitir en tiempo real los datos de entrada de uva en las bodegas. Estos profesionales contarán con cinco vehículos eléctricos para evitar las emisiones contaminantes y los residuos de gases de efecto invernadero.