“Una cosecha muy condicionada por lo tumultuoso de las condiciones climáticas que, en primer término, han marcado diferencias sustanciales en la evolución de la vendimia entre las diferentes zonas de Rioja”. Así concluye el octavo y último boletín de maduración de esa denominación de origen tras señalar que la situación de vendimia está generalizada.
El control del estado de la uva y los viñedos llevado a cabo el 25 de septiembre confirma la “satisfactoria evolución de la maduración” y que la uva se encuentra en su fase final. La graduación alcohólica probable es moderada y los valores madurativos correctos. Las bayas de las uvas de todas las variedades han alcanzado el tamaño y peso dentro de los rangos medios y se mantienen estables las condiciones sanitarias y vegetativas.
El boletín recomienda “prestar atención al equilibrio entre el estado sanitario y la madurez de la uva para determinar el momento idóneo de vendimia”.
Foto: DOC Rioja