La Encina del Inglés 2020: complejidad y carácter

De nuevo la alegría de tropezar con una cápsula de La Melonera, el proyecto de recuperación de la viticultura milenaria de la Serranía de Ronda que ha devuelto a la actualidad variedades de uva prácticamente extintas. Tras años de esfuerzos, esos vidueños olvidados ocupan ahora una buena parte de la finca. Y las botellas, o algunas de ellas, aparecen coronadas por una imagen, en esta marca tintada en verde, que recuerda (“uvas negras con fajas negro-grises”, Simón de Rojas dixit) a la melonera. 

Allí, rodeado de encinas, en tierras altas y a partir de cultivos radicalmente ecológicos nace La Encina del Inglés 2020. Nombre y etiqueta que evocan a los numerosos viajeros románticos que se sintieron fascinados por aquellas tierras y gentes. Con variedades que durante siglos han dado vida a los vinos dulces de la zona se elabora ahora un blanco seco y joven con algo de reposo en botella. 

La presencia mayoritaria de moscatel morisco (moscatel de grano menudo) le confiere una desbordante expresión aromática y los característicos recuerdos a flores, frutas de hueso maduras y miel. Se insinúan, además, tenues matices a hierbas que dan paso a  un fresco y agradable final que aparece acompañado de ligeras sensaciones metálicas. La presencia de otras variedades, aunque sea en pequeños porcentajes, difumina esa presencia ayudando a lograr mayor complejidad y más pronunciado carácter. 

Bodega: La Melonera
Web: https://lamelonera.com
D. O.: Sierras de Málaga
Variedades: moscatel morisco (80 %), pedro ximénez (10 %) y doradilla (10 %)
Alcohol: 13 %
PVP: 7,50 euros