Mientras que la Junta de Extremadura se ha apresurado a anunciar que solicitará nuevas hectáreas para el cava tras conocerse la sentencia del Tribunal Supremo que devuelve al Ministerio de Agricultura la facultad de decidir sobre futuras plantaciones, la reacción en Cataluña ha sido muy diferente. Unió de Pagesos pide que el ministerio respete “las decisiones que tomen las denominaciones de origen a través de sus consejos reguladores”.
La organización agraria señala que en el supuesto de que no se mantenga la actual decisión de la DO Cava de limitar las nuevas plantaciones durante tres años “los afectados por el desequilibrio serán los viticultores, los más débiles de la cadena, puesto que los excedentes previsibles provocarían una bajada del precio de la uva y del vino”. Los sindicatos extremeños han pedido la dimisión de Luis Planas, ministro de Agricultura.
Foto: DO Cava