Francia no solo vende cada vez menos vino sino que también compra cada vez menos vino. Las importaciones de ese país caen, al igual que lo han hecho sus exportaciones, un 10 % en euros y un 13,2 % en litros durante los primeros nueve meses de este año.
En valor, sufren más las compras de vinos envasados que las de granel o espumosos. En volumen, las compras de envasados y granel descienden respectivamente un 16,8 % y un 13,6 %, aunque las primeras se reducen en 14 millones de litros y las segundas, en 58 millones de litros, según datos del Observatorio Español de Mercados del Vino.
Chile y Sudáfrica pierden más de un 20 % de su facturación. Italia se deja un 13,7 % en valor y un 15,2 % en volumen, mientras que la caída de ventas de España es menos dramática (9,5 % en euros y 13,5% en litros). Nuestro país es el que más pierde términos absolutos por ser, de lejos, el primer proveedor de vino a Francia.
Foto: Nguyen Dang Hoang Nhu (Unsplash)