Dos grandes grupos profundizando en sus mutuas acusaciones y en su guerra de comunicados, viticultores manteniendo la amenaza de abandonar la Junta Directiva si no hay cambios y los políticos asegurando que “están trabajando para encontrar una solución”. Esa es la cada vez más enrarecida situación por la que atraviesa la DO Valdepeñas.
García Carrión ha hecho público su apoyo a las organizaciones agrarias y ha anunciado en una nota de prensa que “ha impugnado judicialmente los estatutos de la DO Valdepeñas por ser antidemocráticos y permitir a Félix Solís vetar todas las medidas de transparencia contra el fraude denunciado”. Félix Solís ha calificado, también en un comunicado, de «hipócritas» estas declaraciones y ha añadido que García Carrión “se opone reiteradamente ante el Consejo Regulador a que se haga la trazabilidad de sus vinos”.
La delegada de la Junta de Comunidades en Ciudad Real, Carmen Olmedo, ha señalado que el consejero de Agricultura ya trabaja para encontrar una solución, informa ABC Castilla-La Mancha. También ha declarado que “es importante solucionar este problema cuanto antes por el bien de la comarca”. En el trasfondo de este conflicto, que ha llegado al Tribunal Supremo, una denuncia por la supuesta venta de vinos jóvenes de la DO Valdepeñas como si fueran crianzas o reservas.
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