El Proyecto Oídio Detection promovido por Grupo Rioja ha ofrecido resultados “parcialmente relevantes” en la campaña 2018, año en que la infección se manifestó con severidad en buena parte de La Rioja. Los trabajos se han centrado en contrastar modelos de predicción de riesgo desarrollados en otros países que han permitido reducir el número de tratamientos entre un 20% y un 50% en el 67% de las parcelas.
El objetivo, limitar al menos un 20% las aplicaciones de productos fitosanitarios por parte de la mitad de los viticultores riojanos, supondría ahorrar unos 1.100.000 de euros al año y permitiría una reducción de casi 10.000 litros de productos fitosanitarios, lo que supone una clara mejora para el medio ambiente.