El reconocimiento de los vinos de villa, paraje y de viña es uno de los principales cambios que propone la Denominación de Origen Bierzo en su reglamentación. El pliego de condiciones, que acaba de ser publicada por el BOE, abre un periodo de alegaciones como paso previo a su aprobación.
Los rendimientos serán un 20% menores de los autorizados cuando se utilice la mención Vino de Villa y un 25% en la de Vino de Paraje. Dentro de los vinos de paraje se encuentra el Vino de Viña Clasificada, con un 30% menos de rendimiento permitido y el Gran Vino de Viña Clasificada, cuya producción máxima será un 35% menor.
La normativa admite dos nuevas variedades tintas estaladiña y merenzao y abre la puerta al vino clarete, elaborado a la manera tradicional, mediante prensado, fermentado en presencia de un pequeño porcentaje de los hollejos y con entre un 40% y un 60% de variedades tintas.
A los 22 municipios que componen el Bierzo se sumarán ahora otras diez localidades de la comarca, con numerosos viñedos viejos, que cuando se constituyó la denominación de origen no participaron en el proyecto. El objetivo de esta ampliación es “evitar el abandono del viñedo en esas zonas”.