Carlos Falcó, un adelantado a su tiempo 

Consiguió ser lo más difícil en la vida, un adelantado a su tiempo. El mundo del vino le debe a Carlos Falcó, Marqués de Griñón, algunos de los cambios que le hicieron avanzar. En su Dominio de Valdepusa, finca de Malpica de Tajo, en Toledo, tomaron nueva vida variedades de uva llegadas de todas partes. Y allí desarrollaron su trabajo los más destacados asesores en viticultura y en enología. Sus vinos tardaron poco en destacar alcanzado una calidad más que reconocida. 

La personal apuesta por aquella tierra le llevó también a elaborar un gran aceite rodeado de sabios con sobrada experiencia. En ese caso, curiosamente, no tuvo que añadir variedades sino hacer lo contrario, retirar una. También en esta ocasión consiguió elaborar un gran producto. 

La pandemia que nos invade se lleva de nuestra vida muchas cosas amadas y también la vida -esa que él ha apurado hasta el último trago- de quien tan bien trató a todo el sector. Alguien sobrado de méritos para ser ahora recordado con enorme cariño y respeto.