Dominio Fournier Crianza 2016, un paso hacia la modernidad

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Está al final de un camino que parece conducir a ninguna parte. Y allí, sobre un cerrado meandro del Duero, se alza lo mejor del viñedo y la bodega en que puso sus ojos, y más tarde un contrato sobre la mesa, González Byass. El también largo camino para estar presente en la Ribera del Duero había llegado a su fin para ese cada vez mayor grupo bodeguero. O tal vez, a su principio.

La denominación de origen sigue reuniendo idénticas condiciones que hace unos años: muestra sin pudor que todavía queda mucho por hacer y ofrece la posibilidad de lograr grandes vinos. Una combinación demasiado atractiva para aquellos inversores que tengan ambición, experiencia y poder suficientes. Aunque para conseguirlo, el esfuerzo en cada añada -poda en verde, aclareo de racimos, vendimias manuales, mesas de selección, maderas nuevas- nunca sea pequeño. 

Tiempo habrá para saber cómo evoluciona el proyecto pero de momento esa bodega, que siempre ofreció interesantes crianzas y reservas, anuncia ya un giro en su trayectoria. Sus tintos, en la nueva etapa, tendrán un diseño más actual. Lo que significa que cuidarán más la fruta, limitaran la presencia de la madera y evitarán las maduraciones excesivas. Así es el primero en dar un paso hacia la modernidad, Dominio Fournier Crianza 2016, cargado de sugerentes aromas a zarzamora, arándanos, regaliz y especias. Con mucha capa, algo profundo, equilibrado y casi redondo solo necesita para alcanzar toda su categoría un poco más de botella. 

Bodega: Dominio Fournier
Web: https://www.dominiofournier.com/es
DO: Ribera del Duero
Variedad: tinto fino
Alcohol: 14,5%
PVP: 20 euros